Botón Chat Mariposa

Habla conmigo :)

Sin Cambios No Hay Mariposas

Cambiar duele. Duele dejar lo conocido. Duele soltar. Duele incluso lo que ya no nos sirve.

Pero hay algo que duele más: quedarse donde ya no creces. Ahí, en ese espacio cómodo pero estancado, se te empieza a apagar el brillo. Y no, no vinimos a esta vida a ser orugas eternamente.

Por eso este blog existe: para recordarte que cada dolor puede transformarse en alas, que los cambios no son castigos, son llaves, y que, como las mariposas, también estamos hechos para volar.

El vuelo empieza cuando nos atrevemos

Hay frases que llegan para quedarse, que se adhieren al alma y la mueven. “Sin cambios no hay mariposas” es una de ellas. Es una filosofía de vida, una forma de entender que, sin cambio, no hay transformación. Y sin transformación, no hay crecimiento.

Quizá a ti también te gusten las mariposas. O quizá no. Pero es innegable lo que representan. Porque antes de esas alas, antes de esos colores, antes de ese vuelo… hubo una oruga. Una que tuvo que encerrarse en un capullo, deshacerse de sí misma y atravesar un proceso de metamorfosis para poder ser. Así como tú. Como yo. Como todos.

Evolucionar no es línea recta

Las personas no crecemos en línea recta. Evolucionamos en espirales: vamos hacia adentro, nos rompemos, nos reconstruimos. Cambiar no es fácil. A veces hasta da miedo. Nos da miedo salir de nuestra zona segura. Nos da miedo perder.

Pero a veces, lo que creemos perder es lo que está impidiendo que ganemos algo mejor: como cuando dejas una relación tóxica, una amistad desgastante o un hábito autodestructivo; como cuando decides dejar de conformarte con lo que no te hace feliz.

Los capullos tienen muchas formas

Puede ser un trabajo que odias pero no dejas, una relación que te drena pero en la que sigues, o una versión de ti mismo que ya no se siente tuya y no sabes cómo soltar.

Pero el capullo no es el destino. Es solo una fase, un puente, un proceso que, aunque duela, te está moldeando.

Cambiar es valiente. Y ser valiente no significa no tener miedo: significa hacerlo a pesar del miedo. Como la mariposa que se libera de su capullo a fuerza de empujones, sabiendo que el vuelo que le espera es más grande que el miedo que la detiene.

Pero entendí que, sin acción, no hay evolución. Que la verdadera transformación comienza adentro y no es de un día para otro.

Cambio, evolución y transformación

A veces confundimos cambio con transformación o con evolución. Pero no son lo mismo:

  • Cambio: el reemplazo.
  • Evolución: el desarrollo sin perder la esencia.
  • Transformación: la magia: tomar lo que somos y hacer algo nuevo con eso.

Es como tomar cada pedazo roto y construir algo distinto, más fuerte, más verdadero.

Transformarse no es olvidarte de quién fuiste. Es integrar lo que aprendiste. Es usar el dolor como impulso, el miedo como maestro, el pasado como guía. Es crecer. Es soltar las pieles viejas. Es mirar hacia atrás y entender por qué tuviste que pasar por lo que pasaste. Es reconocer que no todos los cambios se eligen, pero todos enseñan.

La transformación duele, pero vale la pena

La vida no nos transforma cuando todo va bien. Lo hace cuando nos duele, cuando todo colapsa, cuando te caes y no sabes cómo levantarte. Pero lo haces. Y eso es transformación:

  • Cuando decides no ser la versión rota de lo que te pasó.
  • Cuando te eliges.
  • Cuando sanas.
  • Cuando creces tanto que lo que un día te destruyó ya no tiene poder sobre ti.

     

La transformación se nota

Se nota en tu forma de hablar, de pensar, de amar, en las personas que ahora eliges, en la paz que ahora priorizas, en los “no” que ahora dices sin culpa. En la manera en que ya no dependes, no te conformas, no te abandonas. En la forma en que ahora te abrazas.

No eres el mismo de antes. Y qué bueno.

Quizá no lo notes, pero estás volando.

Y no me refiero a que cambies todo de un día a otro. Es para invitarte a mirar tus capullos, a preguntarte qué versión de ti está esperando ser liberada. Y que recuerdes: ninguna mariposa nació siéndolo. Todas fueron orugas antes. Que no es debilidad estar en proceso. Que lo valiente es no quedarte ahí.

Volar es una decisión

Transformarse es una decisión, pero también es una consecuencia de vivir. La vida nos cambia, nos moldea. Pero tú eliges qué haces con eso:

  • Si te escondes o te expandes.
  • Si te conformas o te elevas.
  • Si te quedas en el capullo o abres las alas.

No olvides esto:

Sin cambios, no hay mariposas. Pero sin valentía, no hay vuelo.

Y tú estás hecho para volar…

1- Sin Cambios No Hay MariposasBlog 01_ Ep.01_3
SCNHM-Marlene González-seguridad

Escrito por: Marlene González

Gracias por darte el tiempo de leer estas palabras. De querer conocerte más. De cuestionarte. De abrirte a nuevas ideas, aunque te incomoden. Estás más cerca de volar de lo que crees.

Sígueme en mis redes sociales

Escrito por: Marlene González

Gracias por darte el tiempo de leer estas palabras. De querer conocerte más. De cuestionarte. De abrirte a nuevas ideas, aunque te incomoden. Estás más cerca de volar de lo que crees.

Sígueme en mis redes sociales

Escrito por: Marlene González

Gracias por darte el tiempo de leer estas palabras. De querer conocerte más. De cuestionarte. De abrirte a nuevas ideas, aunque te incomoden. Estás más cerca de volar de lo que crees.

Sígueme en mis redes sociales

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *